¿FILTRACIONES EN CASA ?

                   

              ¿FILTRACIONES EN CASA ?

Desde hace varios años vivimos en un apartamento que se encuentra en el último nivel del edificio. Me gustó desde que lo vi, porque tiene una hermosa terraza en el techo, con una parte cubierta que incluye un medio baño y una kitchenette y otra parte al aire libre, esta última fue de mucha utilidad cuando mis hijos estaban pequeños ya que, era el lugar ideal para ellos jugar al futbol. Actualmente cuando subimos podemos disfrutar de una hermosa vista de la ciudad de santo Domingo y en las noches es perfecta para deleitarnos, sintiendo el viento fresco en el rostro y ver las estrellas.

Hoy es uno de esos días normales; Mis hijos en sus clases virtuales y yo me dispuse a doblar ropa limpia, así que, tomé mi taza de café, me fui a una habitación y mientras escuchaba alabanzas, empecé a doblar la ropa blanca. Todo perfecto, súper tranquilo, hasta que mi mirada, no sé cómo se fue al techo. ¡Qué imagen tan desagradable había ! Una mancha redonda, grande, húmeda, amarillenta y la pintura abultada. Todo porque nuestra terraza está expuesta a sol caribeño cada día y con el tiempo se fracturaron las juntas de las losas producto de los cambios térmicos. Eso sumado a que, en nuestra capital está lloviendo mucho desde hace varias semanas continuas, provocó que el agua se filtrara por esas pequeñas grietas y ahora tenemos este feo problema de filtración.

 En ocasiones estamos convencidas de que todo está bien en nuestras vidas, que todo está marchando de la manera adecuada, hasta que de repente nos llega un proceso o una crisis en forma de temporal. Ese tipo de tormenta inesperada nos cambia todo, revela las grietas que tenemos en nuestro carácter y pone en manifiesto cosas feas de nuestro corazón, que tanto nosotras como otras personas pueden ver.

En el caso de mi terraza esas grietas fueron provocadas por el sol caliente, el viento y la lluvia. Pero las grietas en nuestras vidas son causadas principalmente por el despreciable orgullo y el abrazador egoísmo. El orgullo es un concepto exagerado de sí mismo, lo que nos lleva a sentirnos superior a los demás. El orgulloso piensa que lo sabe todo.  Creo que, si el fracaso fuera una receta, el orgullo fuera el primer ingrediente. En tanto, el egoísmo es definido como excesivo amor por sí mismo, es cuando nos ocupamos primero de nuestro beneficio por encima de los demás. ¨Se dice que un egoísta es capaz de quemar la casa de su vecino, solo para freírse dos huevos. ¨  La biblia lo dice de esta manera en proverbios 18:1 ¨El egoísta solo piensa en sí mismo y no acepta ningún consejo. ¨

 Hay otras aberturas producto de la crítica, la ira, el enojo, soberbia, envidia, el amor al dinero el cual es la raíz de todos los males, pero sea cual sea el origen de esa grieta, provocará que se filtre silenciosamente un líquido destructivo y sin que lo notemos al principio, hará un daño terrible que irá más allá de lo que pensamos e imaginamos, afectándonos a nosotras e incluso a personas que amamos.

En medio de todo este disturbio, lo que me da paz es que, cuando estas feas consecuencias se hacen visibles en nuestras vidas, la intención del Padre no es avergonzarnos ni condenarnos, sino, hacernos un llamado de alerta para primero identificar el origen del mal, segundo, reparar de manera eficaz cada grieta en nuestras vidas y corregir el daño causado.

Para reparar el techo de esa habitación tendremos que buscar un experto y hacer una inversión significativa de dinero, a fin de, enmendar correctamente este asunto. En cambio, nuestro Hacedor nos asegura que si le presentamos nuestros problemas, tenemos la garantía de que Él nos restaura y además contamos con Cristo quien ya pagó todo por ti y por mí.

Es mi oración que seamos obedientes para evitar daños por pecados practicados, que el Espíritu Santo nos muestre cada grieta en de nuestro temperamento, que El mismo nos selle y nos revista con su presencia como el más resistente impermeabilizante, capaz de impedir el paso de todo aquello que nos quiera perjudicar. Conviértenos Señor en mujeres sabias, empápanos de tu  amor y humildad. Ayunados a recordar que las tormentas no vienen para dañar, sino para relevar lo oculto en nuestros corazones y mostrarnos que siempre estas con nosotras.

Sabemos que en todas las cosas Dios obra para el bien de los que le aman, aquellos a quienes él ha llamado para formar parte de su plan.

Romanos 8.28 VBl